SEPTIEMBRE / 2018
En el sur de Noruega, en plena frontera con Suecia, se encuentra una zona de bosques e innumerables lagos denominada Finskogen. Recibe su nombre de la inmigración finlandesa ocurrida en el siglo XVII. En ella los emigrantes fineses encontraron un lugar que se adaptaba a sus necesidades haciéndoles sentir como en casa. Una masa boscosa salpicada por cientos de lagos y ríos de todos los tamaños. Una zona interesante a nivel cultural y paisajístico y una joya para el asunto que nos ocupa: el viaje en packraft.
En otoño del 2018 realicé el primer viaje en packraft por esta zona en la que tantas veces he viajado y trabajado, aunque siempre empleando una canoa canadiense. Lo mejor de este viaje fue hacerlo con cuatro amigos de toda la vida: Francesco De Aguilar, Valerio Miragoli, Diego Moreno y Daniel Perez. Con ellos recorrí el itinerario circular alrededor de la pequeña localidad de Austmarka en una semana de viaje. Fue el primer curso/viaje de packraft que realizo en Noruega y transcurrió en la mejor de las compañías.
Tuvimos un inicio pasado por agua pero luego el sol lució durante toda la semana. Pudimos acampar en lugares paradisiacos, hacer fuego por las noches e intentar pescar algo sin demasiado éxito la verdad. Una maravilla de periplo entre amigos donde no dejamos de disfrutar desde el primer día hasta el último. Una actividad con todos los ingredientes para aprender los secretos del viaje anfibio en la naturaleza salvaje del Finskogen.